No tiene una explicación científica pero hay días en los que por motivos “X” tienes un especial atractivo. Eso hace que gustes mucho más y por lo tanto tienes más posibilidades de que las chicas se bajen las bragas y quieran echarte un polvo.

El destino y diríamos que casi un milagro hizo que este adolescente se follara el mismo día ya no solo a su madre, sino también a su hermana. Como lo oyes, después de que mamá le hiciera la mejor paja que le han hecho en toda su puta vida, apareció su hermana como por arte de magia para pedir su ración de polla…