En el momento en el que esta hermana acepta chingar por dinero tiene que tener claro que siempre hay riesgos. En este caso el riesgo era claro, su hermano no tenía preservativos y ella no se estaba tomando la píldora anticonceptiva. Realmente habían quedado en que el tipo la sacaría cuando se fuera a correr, pero no fue así, demasiada tentación como para sacar la verga en el mejor momento…

En cualquier caso ella no se enfadó ni mucho menos, debió sentir muy rica la leche de su hermano entrando dentro de ella y simplemente se quedó quietecita para recibirla. Si te gusta ver cómo se corren de una zorra incestuosa, visita nuestra categoría de corridas internas de incesto porque vas a disfrutar mucho, ¡garantizado!.