Ni un segundo se lo pensó este tipo a la hora de follarse a su tía atascada entre el sofá y la pared. Esta era la oportunidad que llevaba esperando desde hacía mucho tiempo y ni loco la iba a desaprovechar. Ella solo quería librarse de aquella incómoda situación, y lo haría, pero no sin antes probar la gran verga de su sobrino.