Hay mujeres tan sumamente posesivas y ardientes que son capaces de someter a cualquier hombre que se cruce por su camino. En este caso esta señora ha sometido ha su hijo y se ha convertido básicamente en el esclavo sexual de su madre. Obviamente esto sucede cuando el padre no está en casa porque en teoría ella no es más que una dulce ama de casa siempre dispuesta a complacer a su maridito…