Si es que en el fondo no es tan grave eso del incesto y si no fijaos en la historia de estas dos hermanas. Se la han chupado a su primo tan ricamente y se han tragado toda su corrida, pero además la han saboreado.

El chaval también se las folló, pero a veces una mamada te deja mucho más a gusto que echar un polvo. Aunque las chicas físicamente no se parecen porque cada una es de un padre y una madre, su genética alberga claramente el gen del incesto, ¡no cabe duda!.