Hasta ese día las tres hermanastras se masturbaban juntas en la misma habitación, pero jamás habían tenido orgasmos sincronizados. Lo ideal cuando tienes sexo con alguien es poder correrte a la vez porque la experiencia es alucinante, aunque no es sencillo y hay que tener mucha complicidad para ello.

Pues por lo que fuera esa noche las tres chicas empezaron a correrse a la vez y aquello fue el detonante para que acabaran juntas en la cama. Precisamente no se fueron a dormir, al revés, les excitó tanto aquello que empezaron a follar… Vaya pedazo de paja os va a caer viendo este trío de incesto lésbico chavales.