Estaba todo preparado para tener una velada incestuosa perfecta. Nadie les molestara durante un par de días porque madrastra e hijastro se citaron en una habitación de hotel con todas las comodidades. Hacía mucho tiempo que se estaban controlando porque había mucha química entre ellos, así que decidieron que ya era hora de conocerse “a fondo”.

Este es uno de esos casos en los que sobran las palabras y dejar que los protagonistas de esta historia de amor incestuoso os cuenten con actos qué tal fue su cita…